Mario E. Fumero
Se ha sabido por fuentes bien confirmadas, que tanto la ONU como la UNESCO están elaborando un plan bien diseñado con el propósito de regular y controlar todo lo que podemos expresar por medio de las redes sociales o en online, Para ello están tratando de establecer una policía especial que silencie a todo lo que podamos expresar contra el orden establecido en relación con el Nuevo Orden Mundial y sobre el tratado de la pandemia y la ideología de género.
¿Como se podrá hacer esto? Mediante el establecimientos de convenios de estos organismos internacionales con gobiernos sumisos a estos tratados, por medio de los cual silenciaran a los que no pensemos igual al Nuevo Orden impuesto por este eje de control, y es por ello que impulsaran un acuerdo mundial sobre pandemias para controlar tus decisiones sanitarias, e imponer restricción de la libertad religiosa en lo relacionado a la promoción de la ideología LGTBQ, por lo que quieren determinan lo que pretendemos decidir leer, publicar y compartir.
Este plan, ya elaborado y en proceso de imposición, se denomina “Directrices para la Gobernanza de las Plataformas Digitales’, en dónde no solamente quieren controlar la inteligencia artificial y otras informaciones falsa, sino que tratan de impedir que la gente se pueda expresar contrario a lo que los organismos internacionales impongan en el área ideológica y de salud. De manera que esta policía estará pendiente de lo que decimos para procesar a aquellos que no actúen dentro de un diseño plasmado, donde no se podrá combatir ninguna idea o política proveniente de las Naciones Unidas, la OMS o la UNESCO.
Sin embargo, no cabe duda de que algo se tiene que hacer para combatir las noticias falsas y las calumnias que por las redes sociales se difunden, así como los montaje y manipulación que se hace con fotografías, las cuales son adulteradas para hacer ver cosas que no son reales, lo cual ya entra al plano lo de lo que podemos catalogar difamación. No es lo mismo señalar y condenar manipulaciones informáticas falsas, que limitar la libre expresión del pensamiento, principalmente cuando lo que estamos expresando tiene que ver con la defensa de valores y principios, que rompe la lógica para imponer doctrinas o ideologías contrarias a lo que podemos catalogar natural y normal. Debemos diferenciar las ideas, de los falsos testimonios, así como la información manipulada, para decir cosas contrarias a toda lógica y ciencias.
No cabe duda de que tanto la inteligencia artificial, como las redes sociales, se prestan para distorsionar y manipular a las personas y lo más preocupante de ello es la facilidad con que nos puede ofrecer información falsa, de forma tal, que lentamente va anulado la capacidad de las personas para razonar y pensar por sí mismo, y de esta forma establecer pautas y criterios preestablecido, con lo cual, quedamos a expensas de no ser nosotros mismos. Ya hemos visto que muchos estudiantes, en algunas áreas de las ciencias, se vuelven inútiles para usar su propia inteligencia debido a que se han hecho esclavos del uso fácil de la tecnología, para que lentamente sean anulados en su capacidad de razonar y actuar con su propia inteligencia.
Está bien el control, pero corremos el peligro que se nos inhiba para poder expresar lo que pensamos, bajo la amenaza de caer víctima de la policía que restringe los pensamientos, y es ahí en donde, como líderes cristianos, tenemos que estar atentos, porque nuestras libertades en la defensa de la moral estarán en peligro cuando la inmoralidad se legalice y los mensajes contra la misma se conviertan en delito.